
"Dígame" dijo Toby mientras sacaba su libretita "¿qué vio exactamente?"
"Bueno" dijo el anciano Eyrie rascándose la cabeza mientras recordaba "Era muy tarde; mucho más tarde que mi hora normal de dormir. Estaba en mi cama a punto de quedarme dormido cuando recordé que Momoe mi Fungree se había quedado afuera en el porche. '¿Y si llueve?' pensé 'Será mejor que lo deje entrar.' Así es que encendí la vela de al lado de mi cama y fui a buscar a Momoe."
"Cuando entré a la sala oí un ruido extraño me asusté así es que me apuré hacia la puerta del frente la que da hacia el porche. Allí fue que al alzar la vista vi esos ojos amarillos con forma almendrada tan brillantes como el fuego de una hogera... nunca había visto algo parecido."
"Qué interesante" dijo Toby asintiendo con la cabeza mientras escribía todo en su libretita. "Por favor continúe..."

"Bueno" siguió el Eyrie "parece que se asustó por la luz de mi vela pues cuando abrí la puerta saltó como si la hubiese sorprendido. Así fue como la pude ver un poco mejor; no pude distinguir su forma pero estoy seguro de que tenía un collar de pelo morado alrededor del cuello y esos ojos que le describí antes. Me miró tan fijamente; como si estuviese viendo algo a través de mí. Lo bueno es que Momoe estaba bien solamente un poco asustado pero al menos no estaba herido... usted me cree ¿no es así? Puedo estar anciano y medio ciego ¡pero no invento historias!"
"Por supuesto que le creo señor" dijo Toby terminando de escribir sus notas. "Gracias eso es todo." Al poco rato Toby guardó su libretita y empezó a prepararse para ir al bosque a la media noche...
...Era una tarde fría del mes de Reunirse cuando Toby se tomó hasta la última gota de su Juppie de moca y cacao y salió en busca de la Usul Sombra, quien podría estar en cualquier parte. Sin poder iluminar su camino con una antorcha o vela (pues la Usul Sombra podría verlo muy fácilmente desde una gran distancia), Toby se vio forzado a caminar en la oscuridad, con la esperanza de encontrar los pasos de la Usul, mientras ella paseaba por el bosque.
Sin embargo, lo que Toby no sabía es que, mientras él caminaba por el bosque, la Usul Sombra había estado siguiéndolo. Molesta por tantos años de persecución, la Usul decidió que ya era tiempo de enseñarle una lección a Toby. Esperando el momento en el que el joven Gelert estuviera más vulnerable, la Usul Sombra esperó que Toby, sin saber, llegara a un pantano.
"Esto es increíble... tengo frío, hambre y estoy mojado y cansado." Se quejó Toby, mientras se sentaba, temblando por el frío. "No puedo imaginar cómo esto podría empeorar..." En ese momento, se oyó un ruido extraño. Unas ramas se rompieron y cayeron al piso mientras que los árboles se sacudían violentamente. "No me digas... ¡NO!" Toby gritó mientras volteaba, sólo para ver un montón de piedras, tan grandes como piedras místicas, volando hacia él. "¡¡¡AAARRGH!!!" El pobre Gelert gritaba mientras su cuerpo se llenaba de heridas y moretones, atormentado por un dolor tan grande que nunca antes había sentido.
"Jejeje, Piedrecitas mágicas." la Usul Sombra se rió mientras soltaba ese torrente de piedras sobre el pobre Gelert. "Pero sólo estoy empezando...¡ya verás!" Dicho esto, la Usul empezó a carcajearse mientras cerraba los ojos con fuerza (como para concentrarse mejor), retrocedió y sopló una gran ráfaga de viento que, antes de irse por el bosque, jaló humedad del pantano, creando un ciclón de agua y viento que iba hacia donde estaba tirado Toby el Gelert. Aún sorprendido y adolorido por las piedritas mágicas, Toby ni se dio cuenta cuando el ciclón de la Usul Sombra lo jaló y lo lanzó por los cielos de la noche oscura.
La Usul Sombra se rió, y desapareció en la oscuridad de la noche....
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